Enfermedades oftalmológicas
En este espacio podrás descubrir cuáles son las principales enfermedades oculares, te ayudaremos a reconocer sus síntomas y te contaremos cómo se trata cada una de ellas.
Blefaritis
¿Qué es la blefaritis?
La blefaritis es una inflamación causada por la producción excesiva de grasa por parte de las glándulas que se encuentran en los bordes superior e inferior del párpado. Esta grasa se acumula encima del párpado de forma casposa, provoca su inflamación y puede favorecer la irrupción de infecciones bacterianas. Los párpados afectados por blefaritis suelen aparecer enrojecidos, escamados e inflamados, y es común que se vean afectados los dos ojos. Los pacientes con trastornos previos como la dermatitis seborreica, rosácea cutánea o con alteraciones hormonales suelen ser más propensos a desarrollar blefaritis.
Existen dos tipos de blefaritis, según la zona del párpado que se vea afectada (anterior o posterior). Los casos de blefaritis se pueden clasificar como:
- Blefaritis estafilocócica: causada por un tipo de bacteria, el estafilococo, y puede provocar la aparición de costras y escamas duras, conjuntivitis y la pérdida de pestañas (aunque estas normalmente vuelven a crecer después de un tiempo).
- Blefaritis seborreica: causada por la acumulación excesiva de grasas en el borde del párpado y, aunque no suele presentar unos síntomas como la anterior, sí que produce inflamación y enrojecimiento en la zona.
- Blefaritis mixta: acumulación en exceso de grasa que favorece la irrupción de infecciones bacterianas.
Ojo sano
Blefaritis
Síntomas
Algunos de los síntomas característicos que se asocian a la blefaritis son:
- Enrojecimiento ocular
- Aparición de costras o escamas en las pestañas
- Párpados de aspecto grasoso y pegadizos
- Inflamación, dolor y picor en la zona
- Sensación de tener algo en el ojo
- Mayor frecuencia de parpadeo
- Pérdida de pestañas
- Sensibilidad a la luz
- Visión borrosa
- Sequedad ocular
- Ojos llorosos
- Pestañas que crecen de manera anormal (pestañas desviadas)
Tratamiento
Aunque no exista cura para la blefaritis, existen tratamientos que permiten controlar sus síntomas:
- Compresas con agua tibia: es importante mantener una higiene diaria adecuada y constante en la zona del párpado, aplicando compresas con agua tibia en la zona. Se recomienda colocar una compresa escurrida sobre los párpados cerrados durante unos 5 minutos y masajear la zona verticalmente hacia la raíz de las pestañas, para favorecer que se despeguen las láminas pegadas a la pestaña y limpiar la zona de grasa y bacterias. Para acabar, se puede limpiar la zona con una solución jabonosa o con toallitas especiales.
- Antibiótico: en algunos casos se puede precisar del uso de ungüentos y colirios antibióticos o antiinflamatorios. Se recomienda aplicarlos con suavidad en la base de las pestañas.
- Gotas oftálmicas: su aplicación puede ayudar a controlar el picor, la sequedad y el enrojecimiento oculares.